Semana
complicada en la que los commodities han sobrevivido a las tempestades. El
dólar parece que ha reaccionado, fortaleciéndose levemente mientras que las
bolsas sufren una de las peores semanas de los últimos años. El crudo, por su
parte, vive un descenso espectacular en los precios, que seguramente no notemos
de tal manera en nuestros bolsillos.
En España,
siguen a la baja los precios, principalmente de trigo, cediendo 2 euros en
Barcelona o 4 en Navarra. La cebada sigue los mismos pasos destacando -3 en
Cuenca y Navarra. La avena es la única que parece que tiende a subir, ganando 5
euros en Córdoba y 2 en Cuenca. Maíz sufre ligeros descensos, mientras que el
girasol permanece estable.
Ganancias en trigo, maíz y soja tanto en Chicago como en
Paris. La semana comenzó con excelentes subidas pero conforme pasaron los días las
ganancias mermaron. El viernes se publicó el informe mensual del USDA en el que
destaca la bajada de stocks mundiales para la soja y el maíz, con la seca en
Argentina como principal responsable.
Wall Street sufrió una dura semana, y ante estas situaciones
los inversores buscaban cobijo en las materias primas. Pero se ve que esta vez
los inversores han mirado para otro lado. Los abultados stocks globales meten
miedo a los dueños del dinero.
El trigo tomo ligeras ganancias al final de la semana, aunque
el martes su precio era mucho más alto. Pero para mantener esos precios hay que
haber demanda, y de momento, gran parte de esa demanda la aplaca Rusia, que
esta semana se ha llevado de nuevo una buena venta a Egipto.
La soja ha sido la que más ha subido. Hay preocupación por
la sequía en Argentina, y eso lo muestra el mercado. Pero sin entrar en ningún drama
a sabiendas que la buena cosecha brasileña podrá asumir todas las perdidas del país
del tango.
Escuchando a un magnifico analista ya curtido en canas. Su visión
muestra total despreocupación por fondos, mercados financieros y demás complementos
externos. Solo contempla dos datos, oferta y demanda, producción y consumo. Venimos
de 5 cosechas record de maíz en EEUU y 4 de soja, con los mayores stocks
mundiales de la historia. Pero aun así, los precios no bajan, y ahí es donde
entra el consumo. En estos últimos años la demanda es feroz, y crece de manera
continua y constante. No solo China está al otro lado del mostrador, sino todos
los países asiáticos, que cada día tienen mejor calidad de vida y consumen más
y mejor. Por lo que necesitamos año tras año cosechas record a nivel mundial
para que los precios se mantengan. Y si hacemos caso a los estadistas, ya va tocando
un año con una cosecha más mediocre, y quizá los precios exploten al alza.
Desde hace dos años no sufríamos una semana tan dura para el
precio del crudo, con unos descensos de los precios del 9%. Desde que el pasado
24 de enero se pasara de los 70 dólares el barril, la caída no cesa. La
estrategia de los países de la OPEP se ha vuelto contra ellos mismos. Al
aumentar los precios, aumenta la rentabilidad del fracking. EEUU ahora mismo está
en máximos de producción con 791 plantas en funcionamiento, cuando hace un año
había 591, saliendo al mercado 10,25 millones de barriles diarios. Es por ello
que actualmente produzca tanto petróleo como Arabia Saudí, primer exportador de
crudo del mundo. Ante esta situación, ni siquiera países como China o la India
son capaces de consumir esta sobreoferta, tendiendo los precios a la baja. A día
de hoy el barril WTI cotiza a 59,19 $ (-6,47) y el barril Brent a 62,72 $
(-6,26).
No hay comentarios:
Publicar un comentario